El pasado 8 de febrero despidieron a nuestra compañera Paz, trabajadora de la empresa de lácticos Pastoret de la Segarra, una empresa ubicada en Sant Guim de Freixenet y muy conocida en las Tierras de Ponent por sus productos artesanales. Han construido una marca que ahora también es conocida en todo el territorio catalán por ser una empresa «caciquil». Una empresa que no sólo vulnera derechos laborales de forma constante, sino que también reprime y persigue toda lucha sindical.
En septiembre del año 2021, unas compañeras constituyeron la sección sindical de la CGT Pastoret, como respuesta lógica a la necesidad de autoorganización y autodefensa ante las precarias condiciones laborales a las que están sometidas los y las trabajadoras de esta empresa ; y, al mismo tiempo, expandir nuestra organización en Ponent, tras la creación del sindicato de actividades diversas CGT Urgell-Segarra (con sede en Tàrrega). Este hecho ni gustó a la empresa ni gustó a algún sindicato amarillo. Por tanto, situados en este contexto de acción sindical y con la clara intención de desmembrar nuestra sección, la empresa con pequeñas actuaciones ya inició una cierta persecución sindical contra nuestra compañera, Paz, con la idea de aniquilar un colectivo de trabajadores y trabajadoras que luchan y reivindican derechos laborales colectivos.
Esta persecución se manifiesta finalmente con el despido de la Paz con la excusa de una falta leve ocurrida 3 meses antes, cuando entonces, esa falta, ni tuvo ninguna consecuencia ni nadie le informó de nada. ¿Casualidad de que el despido llegara, casi dos meses después de la falta mencionada, al día siguiente de que ella y los demás compañeros de la sección repartieran información sindical en torno a los derechos laborales?.
Lo que hacen ella y el resto de compañeras de la sección ha sido tener el acierto, la valentía y la coherencia de crear una sección sindical en un ambiente hostil (tanto a nivel territorial como empresarial) donde la clase trabajadora suele obedecer al patrón que a cuestionar y reivindicar sus condiciones y derechos laborales. A los compañeros y compañeras de CGT Pastoret empuja la DIGNIDAD, la LUCHA y la CONCIENCIA DE CLASE, porque tienen claro que nadie trabaja por nosotros.
A nuestra compañera Paz le han acosado por negarse a hacer más horas de las que le corresponden, le han despedido por no agachar la cabeza delante de quienes se creen poderosos, le han despedido por ser una trabajadora que ha dicho lo suficiente a los abusos constantes de los empresarios que piensan que nuestras vidas están a su servicio. Ya sabemos que «la CGT no es bienvenida a ninguna empresa y así nos lo han hecho saber tanto en el Pastoret como en otras empresas» y nosotros queremos que sepan que ellos no son ni serán nunca bienvenidos a nuestras vidas y que estamos hartas que Lleida y las comarcas de Ponent sean el paraíso idóneo para la explotación.
Por otra parte, queremos denunciar el papel que han tenido los miembros del comité de empresa representados por UGT y CCOO, que de forma servil hacia la empresa y obviando sus deberes como representantes de los y las trabajadoras por los que han sido escogidos, no sólo han denegado el apoyo a la compañera despedida, sino que están atizando fuego contra los compañeros y compañeras de CGT amenazando, coaccionado y chantajeando para poner en contra a los propios trabajadores entre ellos. Vergüenza nos haría jugar ese papel.
Como siempre, desde la CGT, ya sea tanto con el caso del Pastoret de la Segarra, como donde sea necesario, reivindicamos la defensa de nuestras afiliadas, y siempre desde la solidaridad y el apoyo mutuo. Por eso denunciaremos y llegaremos donde sea necesario, a través de la acción sindical, de la acción social y de la acción jurídica, y desde las redes y la calle, hasta conseguir que la compañera Paz sea readmitida en su sitio de trabajo.
Queremos conseguirlo por ella, porque es una luchadora pero también para poder empoderar y fortalecer la autoorganización de los trabajadores en la defensa de sus derechos laborales y en la lucha contra los ataques que reciben por parte de la empresa.
«¡SI NOS TOCAN A UNA, NOS TOCAN A TODAS!».
¡Basta persecución sindical! Readmisión Ya!
Sindicalismo 