La cineasta retrata a la clase trabajadora y la manera en que enfrenta la convivencia con los inmigrantes en ‘Seis días corrientes’, rodada con actores no profesionales. Espiga de Plata y Premio del Público en la Seminci, y Mejor Actor en Locarno (Mohamed Mellali y Valero Escolar).
Un fontanero contratado por el equipo de la película provocaba las averías que luego tenían que arreglar los protagonistas –Moha, Valero y Pep-, tres fontaneros reales metidos a actores en este tercer largometraje de Neus Ballús, Seis días corrientes. Crónica de una semana de trabajo, en la que Mohamed tiene que convencer de que puede sustituir a Pep que se jubila, y que ganó la Espiga de Plata y el Premio del Público en la Seminci, y el de Mejor Actor en Locarno (Mohamed Mellali y Valero Escolar).
Narrada desde la cotidianidad, con aire de cine documental y con un sentido del humor inteligente y muy refrescante, la nueva película de la cineasta es una historia de hombres nacida en el núcleo de un mundo de mujeres. Dirigida por Neus Ballús, la película cuenta con guion de ella misma junto a Margarita Melgar, producción de Miriam Porté, dirección de fotografía de Anna Molins, dirección artística de Marta Collell, montaje de la directora y de Ariadna Ribas, sonido directo de Amanda Villavieja y Elena Coderch, casting de Mireia Salgado, vestuario de Alba Costa y maquillaje de Mercè Sánchez.
Seis días corrientes, además, es un relato de la clase trabajadora, de la manera en que enfrenta la convivencia con los inmigrantes, de «cómo gestionar las diferencias»… contado desde el punto de vista de una mujer, cineasta heredera de la cultura de esa clase obrera y con una intención de realidad que incorpora, como en la vida, la comedia y el drama. Con momentos divertidísimos, Neus Ballús hace un retrato de los trabajadores españoles cargado de humanidad, verdad y esperanza. La cineasta habló con Público de este trabajo.