- La Asociación en Defensa de la Sanidad Pública de Aragón exige que no se realicen despidos entre el personal.
Ante la decisión de despedir personal en la Sanidad Pública de Aragón, desde la MAS (Mesa aragonesa por la Sanidad pública de Aragón) exigen que no se realice ningún despido. Se concentrarán el viernes 22 de octubre a las 19.00 horas en Plaza de España bajo el lema: “No sobra nadie, nos faltan recursos”.
La Asociación en Defensa de la Sanidad Pública Aragonesa (ADSPA) insiste en que desde 2019 la sociedad está inmersa en una pandemia, que aún no ha sido erradicada. Para luchar contra la enfermedad del COVID-19 se han usado recursos económicos y personales de la sanidad pública en detrimento de otras actividades asistenciales.
La Asociación está en contra de los despidos en un momento en que las listas de espera son “inasumibles” y aún no se han recuperado las citas presenciales, intervenciones quirúrgicas, seguimiento de enfermedades crónicas y pruebas diagnósticas.
Recuerdan que desde 2010 la sanidad pública lleva sufriendo recortes en recursos personales y materiales. “Si la Consejería nos dice que la Atención al paciente ha de ser de calidad, decimos 0 despidos”, señalan, y argumentan que siguen sin abrir los centros de atención continuada y los recursos humanos en zonas rurales son, en muchos lugares, insuficientes.
Exigen al Gobierno de Aragón que amplíe el crédito “lo que sea necesario” porque la sanidad debe ser de calidad y estamos en una pandemia que aún no ha terminado. Existe un déficit de 180 millones en el presupuesto del año 2021 y han llegado unos fondos europeos para “paliar el exceso de gasto” producido por el COVID-19 pero denuncian que estos fondos se han destinado a conciertos con empresas privadas ligadas a la salud, en vez de revertirlos en la sanidad pública.
También se quejan de que dentro de la pandemia, los protocolos muy restrictivos que se están implando ralentizan el trabajo de los y las profesionales de la sanidad, con excesos de carga de trabajo del personal, que lleva más de un año y medio trabajando con una presión psicológica enorme.
“Jubilaciones sin contratar, bajas sin cubrir, vacaciones del personal contratado para reforzar plantillas por el COVID-19 sin disfrutar y excesos de horarios del personal” de entre 100 y 200 horas de más anuales, son otras de las denuncias por las que saldrán a la calle este viernes.
Reivindican el fin del deterioro del proceso asistencial que está “viéndose afectado por una inoperancia de las direcciones de gestión” de los sectores sanitarios aragoneses, “las cuales recordemos, son cargos de libre asignación”, señala la ADSPA.
La pandemia, también afirman, ha hecho mucho más daño en la salud mental, sector que ya estaba bastante mermado, “sin recursos humanos y con falta de inversión”. En este sentido reivindican que hay que analizar y revisar las incapacidades actuales, así como promover los apoyos y protección necesarios “de acuerdo con la Resolución de la ONU sobre las personas con discapacidad, mejorar la atención a los Derechos de las Personas atendidas en los servicios de Salud Mental y Redes de Rehabilitación y Recuperación. Aplicación de normas Quality Rigths de la OMS”.
También piden garantizar la financiación or parte del Estado para la aplicación de la Ley de Promoción de la Autonomía Personal y Apoyo a la Dependencia. Promoción de la Autonomía de las personas. Por último, ven necesario completar la Red de Atención Infanto-Juvenil y el fomento y creación de servicios de Salud Mental de extensión y Atención domiciliaria para la atención a Emergencias y Recuperación.